martes, 8 de junio de 2010

Mozárabes del siglo X (2)






A la muerte del gran rey astur Alfonso III, su hijo y sucesor, el rey García I, dedició el traslado de la corte desde Oviedo a León, iniciándose así en él la dinastía de reyes leoneses. Y ello acaeció en el año 910. Se cumplen pues ahora 11oo años del Reino de León. En tan lejana fecha, aquellos monjes cordobeses que optaron por dejar Al-Andalus para refugiarse en tierras del norte, erigieron el Monasterio de San Miguel de Escalada, sobre una antigua iglesia visigoda arruinada dedicada al arcángel, y bajo patrocinio del rey astur, Alfonso III, que no vería terminada la obra, pues murió en Zamora en el referido año 910. Cabe destacar que este rey dió un gran impulso a la repoblación de sitios como Astorga, donde recibiera en un principio sepultura. Y fue el obispo de este centro episcopal, Genadio, el encargado de consagrar en 913, el templo mozárabe que ilustran estas fotografías. Es quizás el edificio en pie más antiguo del reino leonés. Su primer abad llamábase también Alfonso, y dirigió una comunidad monástica que, de origen andaluz, legó al recién creado reino norteño, una de sus joyas arquitectónicas, el más señalado de los templos del arte mozárabe (también llamado "de repoblación", para estas zonas geográficas). Es de destacar la técnica mozárabe del biselado en los capiteles, con un amplio despliegue de decoración vegetal, en aquellas piezas que eran de nueva factura, pues muchas eran romanas reutilizadas. En concreto, del pórtico meridional de doce columnas (véase foto), siete son mozárabes, y los restantes, los más orientales, son reutilizados, como lo prueba el curioso detalle de que a los capiteles les falta una cara por haber estado anteriormente usados adosados a algún pilar mayor. También hay decoración zoomórfica de aves picoteando racimos de vid.
La iglesia es de tres naves. Los arcos son, por supuesto, de herradura; y aunque la cabecera consta de tres ábsides, abovedados además, éstos no se acusan al exterior, donde sólo se aprecia un pétreo muro (en foto).
La torre es posterior, del siglo XI, y su ventana cuenta con un doble arco de herradura que imita al de la cara occidental del pórtico. (véanse fotos).
Para concluír, observar que este templo es de planta basilical, siguiendo la tradición paleocristiana con intercolumnios apeados en columnas (como explica la profesora Concepción Abad en "Arte medieval I" de ediciones "Historia 16") en contraposición al de San Cebrián de Mazote, comentado en la entrada anterior, que es contra-absidiado.

6 comentarios:

Kikko dijo...

Una joya de la arquitectura sacra.

ismo dijo...

Por las fotos parece una auténtica belleza. Confieso que se me escapa la diferencia que señalas con el de San Cebrían; mi conocimiento del lenguaje artístico es limitado.

Esmaliat dijo...

La diferencia señalada alude a que San Cebrián tiene un ábside a los pies de la iglesia, enfrente del triple ábside de la cabecera. En medio, la nave central. Es por ello, "contraabsidiada", y aunque se ignora la función de este ábside, se supone que responde a necesidades litúrgica de rito mozárabe. San Miguel de la Escalada no tiene este ábside contrapuesto, sino que es de planta basilical (aunque con un pequeño transepto, que no se aprecia volumétricamente en el exterior) Son los dos mejores ejemplos existentes de las dos principales tipologías de templos mozárabes.
Por cierto Kikko, recordarás la excursión que hicimos a este lugar(¿te acuerdas que el cartel puesto por las obras que ejecutaba la junta de Castilla y León decía erróneamente que era un templo románico?) Es que....manda c...

Kikko dijo...

Miedo da pensar que la restauración de estos legados artísticos están en manos de los mismos que rotulan esas burradas. Los técnicos encargados de la misma tendrían que haber reparado en el error e instar a corregirlo, supongo. Si no es así.... malo, malo.

Kikko dijo...

Yo no sé casi nada de historia del Arte pero.... ¿un templo románico con arcos de herradura? Incluso yo, ignorante en estos terrenos, hubiese reparado en la incongruencia.

Esmaliat dijo...

Aquí existe una tremenda polémica con los monumentos leoneses, pues de su restauración o mantenimiento de encarga la junta, que radica en Castilla, con lo cual la dejadez suele ser la norma, en contraste con los monumentos de la zona castellana que sí se atienden mejor. Otra consecuencia de que este antiguo reino leonés, que era región aparte desde siempre, se haya incluído, por contentar a los nacionalistas castellanos, en una autonomía artificial,y se le haya negado autonomía propia. Es un caso único... y lamentable.